sed!! [libre]

Llevaba unos días sin alimentarme por culpa del último encargo de Caius. Había problemas con unos vampiros y me encargó a mí, junto a Demetri y Félix, arreglarlo todo, como siempre. Tenía sed, así que me acerqué al hospital. Había muchos humanos insignificantes que se estaban muriendo y era una lástima desperdiciar tanta sangre. Nos adentramos en el hospital y empezamos a caminar airadamente.

Mientras caminaba por los pasillos vi a la chica que habia conocido en el bosque, de la cual ni siquiera sabia su nombre. Ella habia sido muy maleducada con la pequeña, y yo sabia que le habia echo algo, nunca nadie se revuelca en el suelo con tanto dolor.
Fue casi corriendo hacia donde ella estaba:
- ¿Que haces aqui? ¿Quieres herir a alguien mas acaso? - le dije ahora mirandola fijamente, tenia ojos rojos, y una mirada de enojo.

Andábamos tranquilamente por los pasillos, buscando un olor que nos gustara, cuando apareció otra vez la estúpida esa. Félix y Demetri se colocaron detrás mía levemente.

-Cobardes...- susurré. -Ya veréis cuando se entere Aro.

Escuché lo que dijo y sonreí.

-No te haces a la idea de lo que ocurrirá ahora...- dije con malicia. -Ahora, si no te importa, apártate o lo haré yo misma. No eres rival para mí...

Observe a los dos corpulentos muchachos que estaban detras de ella. Y no le di importancia a lo que estaba diciendome.
- No te iras hasta que me digas que es lo que le has hecho a Kelli. - Le dije, recordando como la pequeña se retorcia en el suelo del bosque.

-¿Kelli? Tenía entendido que se llamaba Renesmee Carlie Cullen...- dije, riéndome un poco. Mis seguidores me imitaron.
Alcé la mano para hacerles callar.
-Si que ha cambiado todo por aquí... Si quieres saber lo que le hice, pregúntale a ella, o a Edward. Aunque Carlisle lo sabrá mejor que ellos. Da gracias a que a ti no te afecta...- dije con rabia.

- Estas confundiendote con otra niña, ella me ah dicho que se llama Kelli. - Escuche lo que decia acerca de la familia del jefe de mi hermana, El Doctor Cullen. - De hecho, no conosco a ningun Cullen, solamente a Emmett, que lo eh encontrado hace un tiempo aqui en el hospital.-
¿A mi no me afecta dijo? entonces ella si le habia hecho algo a KElli alli en el bosque.

-Anda, ni siquiera conoce a su esposo, ni a su familia. Qué patético, ¿no, chicos?- dije riéndome, mientras Félix y Demetri me imitaban. -Nunca pensé que serías peor de lo que eras. No te acuerdas ni de tus "hermanos" ni suegros. ¿Y de Renesmee, tu hija? Se hace llamar Nessie, o eso tengo entendido. Por eso la llamé monstruo del Lago Ness. Según me han comunicado, se lo puso tu gran amigo Jacob, el chucho ese de tres al cuarto. En serio, en el futuro, si es que lo tienes, serás la vergüenza de la especie, junto a tu familia.- musité con desprecio. -Vamos chicos, debemos alimentarnos y volver a Volterra. Tengo que comunicar algo a nuestros amos.

Cai sentada de golpe en una de las sillas, ¿era verdad lo que ella decia?
¿Esposo, suegros, hermanos, ¡HIJA!?. Senti como ella y sus secuases se iban, se oian los pasos, pero no levante la cabeza. ¿JAKE habia dicho?
No tenia las fuerzas para levantarme de aquella silla, habia entrado en Shock.

Giré la cabeza levemente para verla en shock. Me reí a carcajadas. Seguí buscando algún olor apetitoso, has ta que lo encontré. Comencé a andar por el pasillo, en dirección al humano del que procedía tal aroma.

Al salir del gran shock, vi como la muchacha de ojos rojos, se acercaba a uno de los pacientes del hospital. Me levante, y rapidamente fui a a apartarla de el.
- Alejate! - le dije mientras empujaba a los dos "guardianes" para poder quedar enfrente de ella, agarrandola del brazo con fuerza.

Escuché como se acercaba e intentaba alejarme del humano. Empujó a mis seguidores en vano. Eran vampiros, no los podría mover.
-¿Y quién eres tú para prohibirme comer?

- Soy una humana, como todos los que vez aqui, incluida Kelli. - le dije ahora muy enojada.
- Tu y esas estatuas de alli ... - dije mientras señalaba a los dos hombres que estaban detras de ella, ya que habia podido rodearlos. - ... mejor vayanse de aqui, sino llamare a seguridad.

-¿Seguro que todos son humanos? Por supuesto que esa niña a la que llamas Kelli no lo es. Y, no somos estatuas. Somos algo más que eso. Y no te molestes en llamar a seguridad, no servirá de mucho.- dije con orgullo.

- De que hablas? - le pregunte al oirla decir que Kelli no era humana.

Escuche a mi hermana en mi espalda, pero no me voltee para verla.
Me adelante mas hacia la muchacha ahora deberian irse, ellos no podian a "cazar", como ellos decian, aqui.
- Salgan de aqui! - les dije mientras miraba a los ojos rojos de la chica. a solo 1 metro de distancia, sin soltarla del brazo. -¡DIME QUE FUE LO QUE LE HICISTE A KELLI! - le ordene aun sosteniendola de brazo, y sin ningun miedo.

Escuche lo que el Doctor Damaher decia. ¿acaso mi hermana sabia algo que yo necesitaba saber?.
En eso, el doctor noto lo cerca que yo estaba de la chica, y me estiro hacia atras del brazo. Estaba enojadisima con ella, porque no podia entender que es lo que le habia hecho a Kelli.
Damaher nos llevo a mi y a mi hermana a la oficina.

Estaba enojadísima por su intervención. ¿Es que no sabían con quién estaban hablando?

-Nunca vuelvas a hablar así de mi señor en mi presencia, doctora inútil y patética, al igual que todos los que se encuentran aquí.- dije con furia. -Recuerda que os puedo dañar fácilmente. Por cierto, antes de que me vaya, os recomiendo que os duchéis de vez en cuando, chuchos apestosos.- contesté con desprecio. -La híbrida está bien. No me he pasado. Ojalá hubiera podido, pero tengo órdenes. Y, estoy al tanto de todo lo que habéis hecho en nuestra contra. Algún día lo pagaréis.

Me di la vuelta y mire a mis secuaces.

-Félix, Demetri, es hora de marcharnos. Ya cazaremos por el camino. Tengo noticias para los antiguos. Ya nos veremos perritos. Y controlad los temblores, no querréis dañar a la futura vergüenza de nuestra especie...- musité con desprecio hacía la humana incompetente. -Y recordadle a ella que no se enfrente a ninguno de nosotros a no ser que sea convertida. Es un aviso. El primero y el último.

Félix y Demetri me siguieron mientras caminábamos por los pasillos. No pensaba irme sin cazar. Buscaría otra presa...